Nunca entendí el tabú que rodea tu imagen madre, "ni comen ni dejan comer". Todos te quieren pero nadie se atreve y cuando lo hacen se rodean de un misticismo que te devuelve al olvido más inmediaro. ¿Qué contarán de tí? ¿Por qué te temen?
Se dicen muchas cosas de Ti, incluso que un día fuiste la propietaria de un gran cantidad de cabezas de ganado, que tuviste ráfaga y medialuna, cetro y corona, mantos bordados y tocas.
Yo sólo se, María, que Madre de Jesús y nuestra eres vigia de nuestro devenir, desde la sombra, siempre en nuestra Parroquia, pero ... ¿qué será de ti?
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